La canterana del Islas Canarias valoró su regreso a casa tras confirmarse su fichaje por el club de su vida

La nueva exterior del Spar Gran Canaria reconoce que en su regreso a casa está «muy contenta, aunque todavía estoy asimilándolo, conozco a gran parte del equipo, el club me ha visto crecer, puedo volver a estar cerca de mi familia y parece que todo se junta de nuevo y hace que tenga muchas ganas y mucha energía para este nuevo proyecto y poder volver a jugar en la Liga F Endesa que me hace mucha ilusión».

De la Sara Castro que abandonó el club siendo la capitana de las amarillas resalta que «casi no me acuerdo de como era la Sarita que se fue, pero al final es el ADN del Spar Gran Canaria, de luchar, competir, trabajar y trabajar e ir a por todas, el no dar nunca un balón por muerto, es lo de siempre, aunque también es cierto que algo he ganado en todo este tiempo fuera, en cuanto a conocimientos de baloncesto durante tantos años, pero al final eso es lo que se mantiene, las ganas de competir y de lucha».

En cuanto al rol que le espera en su nueva etapa en la Isla, la grancanaria tiene claro que su entrenador, César Aneas, «es el que manda y tendré que acoplarme para ayudar al equipo en lo que pueda, si tiene que ser al uno (base), lo haré encantada, pero me tendrá que echar una manita para poder adaptarme y si puedo jugar en el exterior de entrada será más fácil para mi». «Si Meli Gretter, que está asumiendo muchos minutos, necesitara un descanso, tengo que adaptarme para poder ayudar al equipo en esa faceta del juego» apunta.

Sara reconoce que a pesar de la distancia ha podido seguir el buen arranque del equipo en este inicio de curso: «Lo de casa siempre se sigue, aunque no podía ver los partidos porque me coincidían muchos de ellos con los míos, pero todo lo relativo a la clasificación y los resultados sí que estoy muy al tanto».

La canterana considera que puede aportar al equipo «lo que se me pida, porque todavía no sé que tal me voy a poder adaptar a la Liga F Endesa, ni al equipo, no lo tengo muy claro, por eso comenzaré aportando el máximo en defensa, que es algo que puedo controlar al 100%, intentar que por mi lado no metan canastas y en ataque, me queda adaptarme, porque me han metido todos los sistemas y tengo un barullo en la cabeza enorme, asumiré lógicamente los tiros liberados que tenga y lo que me diga el entrenador».

De sus actuales compañeras recuerda que coincidió en el pasado «con Kai James, con Nneka Ezeigbo estuve en Zamora, he jugado muchas veces contra Dominique Toussaint y estoy cansada de tenerla en contra (risas), pero con la única que no he coincidido antes es con Karla Erjavec y con Claudia Contell, porque aunque no he coincidido en la pista con Meli Gretter y Agos Burani, si que he compartido tiempo con ellas fuera, porque al final siempre hay alguna Argentina en algún equipo español y se reúnen todas».